Cómo evolucionar tu plan de marketing gracias al uso de herramientas de Geomarketing

Aplicación práctica de técnicas y herramientas de Geomarketing

Sin intención de dar un exceso de importancia al mundo en el que me desenvuelvo o poner por las nubes productos o servicios de Geomarketing comercializados en Schober (Marktanalyst, extensión creada sobre ArcGIS de ESRI), creo que la evolución desde el mapa en la pared y la intuición del director de turno hacia el uso intensivo de herramientas de Business Intelligence en la toma de decisiones es inevitable.   

La evolución del marketing no es únicamente de lo más antiguo a lo más moderno (obviedad), ya que la tecnología avanza a la velocidad que avanza y la gente de ESRI, Pitneys Bowes o SAP hacen todo lo posible para ello, si no que actualmente estos cambios se empiezan a producir en la forma de integrar todas las herramientas de Business Intelligence dentro de una compañía.

Antes pensábamos en piezas con alguna conexión, que podían tener diferentes procedencias, aquellos informes de modelización estadística, análisis de situación, trabajos de análisis geográfico, etc. Hoy se empiezan a oír palabras como Mash-Ups (herramientas como ArcGIS, MapInfo, SAP, etc, conectadas entre sí) y se empieza a ver los procedimientos de análisis y predicción como algo íntimamente ligado entre sí.

Dentro de los procedimientos de consultoría externa la balanza se inclina con fuerza hacia los proyectos integrales. Este tipo de proyectos antes sólo se abarcaban a lo grande, implicando a mucha gente, con perfiles muy diferentes y específicos, empleando fuentes de información variopintas. Todo esto disparaba los plazos y costes. Ahora el manejo de estos procesos pueden realizarse a una menor escala, ya que tanto herramientas, profesionales y procedimientos se han adaptado a enfoques multidisciplinares, acercando estudios complejos a necesidades más puntuales.

En lo que respecta al Geomarketing el conocimiento de esta disciplina se limita, por norma general, a la presentación de ciertos resultados sobre un mapa básico, pero realmente con una ubicación geográfica se puede apoyar todas las etapas de un trabajo de Bases de Datos, de análisis de situación y de modelos predictivos:

  • Trabajo con Bases de Datos. Desde geocodificación automática como manual, empleando cartografía y geodatos de múltiples orígenes (Teleatlas, Navteq, Google, Bing Maps, etc), como el enriquecimiento de registros según la zona donde se encuentre ese registro (indicadores sociodemográficos del entorno).
  • Análisis de Situación. Detectar de donde vienen mis clientes, donde se encuentra mi competencia, y de forma paralela, tras un análisis de rentabilidad de establecimiento o de clientes, poder replicar zonas donde podríamos encontrar un cierto perfil que maximice las opciones de éxito.
  • Modelos Predictivos. De igual forma que en el punto anterior el  identificar zonas de alta potencialidad mediante un Business Intelligence es posible, pero el poder agrupar diversas zonas de alta potencialidad que se localicen en una misma zona geográfica es algo fácilmente realizable desde una herramienta de Geomarketing.

Es sencillo saber de dónde venimos, estudiable y discutible donde estamos, pero el que mejor se adapte al hacia dónde vamos y sea capaz de refinar y agudizar sus decisiones tendrá mucho más que ganar y menos probabilidad de perder.